La importancia de algunos alimentos
Tomates
La composición nutritiva de los tomates, bajos en calorías y en grasa, pero cargados de vitaminas Ay C y de fibra, los hace uno de los mejores guerreros contra una de las enfermedades más mortales en la actualidad: cáncer.
Los tomates, además, contienen gran proporción de un carotinoide poco conocido, el cual, según los científicos, tiene las mismas propiedades medicinales que sus parientes, los betacarontes.
Este carotinoide es especialmente un poderoso antioxidante y un agente anticanceroso, que interviene en la destrucción de las moléculas de oxígeno, llamadas radicales libres, las cuales, al reaccionar en cadena, provocan enfermedades.
Asimismo, los tomates están relacionados con la reducción del cáncer del páncreas y del cuello del útero. Ciertos recientes estudios británicos señalan que los tomates pueden ayudar a prevenir la apendicitis.
Además, son muy ricos en minerales, como potasio, calcio y zinc. Si puede, trate de guardar los tomates en un lugar fresco y no en el refrigerador.
Espárragos
Últimamente se ha descubierto que los espárragos son una fabulosa fuente de un antioxidante que combate el cáncer. Este vegetal, que puede utilizar en sus ensaladas y en otros platos, contiene importantes cantidades de vitamina A, ácido fólico y fibra.
Una antigua fórmula de yerbas, llamada hachimijiogan, es considerada por los amantes de la medicina natural como un remedio eficaz para evitar el avance de las cataratas.
Esto se debe a que está compuesta con un antioxidante de los espárragos que parece evitar la aparición de las cataratas en los ojos. De ahí viene la proverbial fama de los espárragos como cura para los males de la vista.